De todo es bien sabido que en el tema de los coches de competición, cuanta mayor velocidad se tenga, más rápido se podrá alcanzar el objetivo, pero aunque un aumento de la velocidad es muy importante, apenas 20 CV aumenta 2 Km/h. y vale muy caro y muchas horas de investigación para conseguir esto.
Y es que la velocidad no es algo que se tenga que enfrentar directamente, para ello, para ir a través del viento, es importante atravesarlo como si fuera una flecha. Por eso mismo a la hora de competir en la Formula 1, los diseñadores de coche se comen tanto la cabeza para crear un buen sistema aerodinámico, incluso llegando a ser la parte más importante del coche. Los alerones suelen ser los que aúpen esto, mientras que las ruedas suelen ser la parte que más haga frenar el coche, por eso se trata de formar con los alerones delanteros un sistema por el cual el aire pase por encima de estas ruedas, y cuando se pierde el alerón delantero en competición cuesta mucho coger velocidad, doblar o mantener el coche en pista.
Un túnel de viento cuesta mucho dinero, al igual que las pruebas que se hacen en él, pero la formación de una buena aerodinámica junto a un buen chasis, puede ser crucial para la consecución de un campeonato, por eso mismos emplean tanto dinero y tantas horas de trabajo en ello. Según se coloquen los alerones, con posibles inclinaciones, se tomará de una forma diferente la aerodinámica, y el coche correrá más o menos.
