La Creatina.
Hasta hace unos años muy pocas personas conocían o sabían explicar qué es la creatina. Sin embargo, esto ha cambiado en los últimos años, pues ésta se ha convertido en una gran conocida para la mayoría de las personas que realizan entrenamientos de musculación.
Pero, ¿cómo actúa la creatina?
Hay que aclarar que cualquier persona ingiere de forma diaria a través de la carne o el pescado alrededor de 1 o 2 gramos de creatina. Además, nuestro propio organismo genera cada día un gramo o dos más de esta sustancia, por lo que cada día las personas solemos contar con 3 o 4 gramos de ella. La mayor parte de esta creatina se convierte en fosfocreatina, una sustancia que juega un papel muy importante en el suministro de energía a las células musculares.
Por ello, con el fin de mejorar el rendimiento, muchos deportistas recurren a aporte exógenos de creatina, sobre todo aquellos que realizan ejercicios de musculación. Se calcula que en torno al 90 por ciento de los culturistas recurren a suplementos deportivos de creatina.
Aunque la ingesta de creatina de forma exógena puede contribuir y ayudar al desarrollo muscular, también es cierto que una dosis excesiva de esta sustancia puede generar efectos secundarios y complicaciones en el largo plazo.
Lo recomendable en deportistas de alto nivel es la ingesta de 20 gramos de monohidrato de creatina durante la primera semana y luego ir reduciendo la dosis hasta los 5 gramos al día. Cualquier dosis superior a la recomendada puede producir problemas en el riñón y trastornos gastrointestinales.
Uno de los efectos inmediatos de los suplementos de creatina es el aumento de la masa muscular. Sin embargo, ello no significa que a mayores dosis de esta sustancia se consiga un mayor desarrollo. De hecho, con tan solo 3 gramos diarios se consiguen los mismos resultados y se minimizan los riesgos.
