Ilusiones ópticas hay muchas y muy variadas, pero sin duda algunas de las más espectaculares son aquellas imágenes que nos presentan distintas cosas a medida que nos alejamos o nos acercamos a ellas, como aquellas que cuando observamos de lejos nos enseñan la figura o la cara de una persona pero según vamos observando más de cerca nos muestran todo un escenario completo lleno de personajes y detalles con una definición que en ocasiones resulta tan sorprendente que nos es imposible volver a fijar la imagen inicial, que era más simple.
Sin duda el que sea capaz de imaginar una imagen como a la que nos referimos ya tiene de por sí un gran mérito, pero el que además consiga pintarla produciendo el efecto que busca merece ser tratado como todo un artista, un mago de la ilusión gráfica. No cabe duda de que conseguir engañar al cerebro y a la vista con el uso de una imagen es algo que no todo el mundo puede llegar a conseguir. No basta con saber dibujar o tener una gran imaginación, se requiere tener ambas de una manera que muy pocos podemos desarrollar.
Las ilusiones ópticas nos encantan, y no podemos dejar de observar cuando nos damos cuenta de que dentro de una imagen se encuentra todo un universo que se muestra frente a nosotros con toda riqueza de detalles. Cuando lo observamos, continuamos mirando hasta quedarnos convencidos de que hemos encontrado todos los detalles, y en ocasiones nos damos cuenta de que hay incluso elementos que parecen surgir de la nada y volver a desaparecer delante de nuestros ojos, como si el cuadro tuviera vida propia.
Artistas que sean capaces de dibujar estas imágenes dentro de otras con la calidad de detalles necesaria para que se integren correctamente, podemos decir que se cuentan con los dedos de una mano.
