La lluvias torrenciales se han tornado cada vez más peligrosas en los últimos años en varias regiones del mundo. Muchas veces provocan inundaciones que pueden causar daños a nuestro automóvil. Pero aún desupés de atravesar una inundación con un éxito aparente, no hay garantías de que el coche no haya sufrido ninguna avería.
El mismo dueño del vehículo puede quedarse atento al comportamiento de su coche luego de cruzar la parte inundada. Según los ingenieros, el agua es capaz de causar varios problemas a los componentes del coche, en el motor inclusive, por lo tanto es recomendable verificar algunas cosas.
- El filtro de aire, por ejemplo, rastros de barro, tierra y hasta hojas de plantas y árboles dentro del filtro es señal de que el agua puede haber entrado en el sistema. En el caso de haber acumulo de agua, lo mejor es retirar el filtro y enjuagarlo.
- Distintos tipos de ruidos en el motor también pueden ser una señal que de el agua haya provocado sus daños.
- Otro detalle que también da señales que algo está mal es el estado en que se encuentra el aceite del motor. Si al chequear el aceite, éste está con textura tipo mayonesa, por ejemplo, probablemente haya entrado agua.
- Las correas también pueden presentar ruidos, es señal de resecamiento y riesgo de que se rompan.
- Los componentes eléctricos también merecen atención, pues hay peligro de corto-circuito. Estos componentes son siempre muy bien aislados, pero siempre vale la pena verificar.
- La verificación de la parte de abajo del coche es casi obligatoria. Al final, el agua acostumbra arrastrar basura y toda clase de objetos.
- Algunos cambios de ciertos coches tienen una ventas cerca del embriague por donde puede entrar agua. Según especialistas, el embriague puede llegar a patinar por un tiempo, pero después vuelve a la normalidad.