En Estados Unidos se ha llevado a cabo recientemente una de las carreras más curiosas que existen. Consiste en una carrera donde los hombres deben correr con su mujer a cuestas.
El terreno es muy irregular y difícil, con cuestas y bajadas, zonas con barro, agua… El primero en llegar a la meta sin haber perdido a su esposa en ningún momento es declarado ganador.
Por si no hubiesen sido ya lo bastante imaginativos, la competición cuenta con distintos modos de carrera: estilo libre, caballito, con la mujer en un hombro (estilo bombero) o con la mujer colgando de la espalda por las piernas (fotos). Aunque nos parezca extraño, se trata de una competición internacional donde también participan corredores de los países nórdicos.