En un vuelo de Chatauqua Airlines, de Asheville (Carolina del Norte) y Nueva York, el piloto decidió ir al baño poco antes de aterrizar.
Lamentablemente la puerta se atascó y el piloto se quedó atrapado, y comenzó a golpear. Un pasajero alcanzó a escucharlo y quiso ayudar, fue a avisarle al piloto y trató de explicarle la situación a través de la puerta de la cabina.
El copiloto asustado se comunicó con la torre de control dando este mensaje:
«El piloto ha desaparecido, tengo a alguien con un fuerte acento extranjero tratando de acceder a la cabina ahora mismo y trato de lidiar con la situación«.
Luego especificó: “El capitán desapareció cuando fue a usar el baño. Me han dicho que está atrapado dentro y alguien con un fuerte acento extranjero me está dando una contraseña para entrar a la cabina, pero no le voy a dejar«.
Los controladores decidieron que el avión debía aterrizar de emergencia, pero el piloto al fin logró salir del baño y regresó a la cabina, diciendo a la torre de control:
«No hay problema, no hay amenaza»
Para entonces los aviones de combate habían sido alertados, y al aterrizar el avión, se aclaró con el FBI, policía y autoridades del aeropuerto que todo fue un malentendido.