En pocos meses llegará a las pantallas de cine de todo el mundo uno de los estrenos más esperados. Se trata, ni más ni menos, que de la última parte de la exitosa saga vampírica: “Amanecer parte II”. Se trata de un estreno que está atrayendo bastante polémica debido a diversos factores. La pregunta es si estas polémicas son negativas o positivas para la saga y su creadora, Estephenie Meyer. Y es que la famosa saga atrae ya a público de todas las edades y de ambos sexos.
Una de las curiosidades más escalofriantes del rodaje está relacionada con un personaje muy “especial”. Se trata ni más ni menos que de la pequeña Renesmee, la adorable y dulce hija mitad mortal y mitad vampiro que concibió Bella en la primera parte de Amanecer.
Muchos lectores de la saga se han preguntado cómo iban a hacer con el crecimiento prematuro de la pequeña Renesmee (que crece a una velocidad sobrenatural), y ha sido una de las grandes incógnitas desde que se leyera el libro hasta ahora, y por tanto, uno de los mayores retos para el director y el resto del equipo de rodaje. La actriz Mackenzie Fox es quien da vida a la niña vampiro en la película, y no se han utilizado otras niñas actrices más pequeñas para los cambios en edades como se pensaba, sino que el director tuvo la… ¿magnífica? idea de crear un pequeño robot de unos 90 centímetros con aspecto similar a Mackenzie para que ocupara su lugar en algunas escenas.
Pero durante el rodaje no tardaron en darse cuenta de la atrocidad de idea que habían tenido, pues el resultado fue realmente terrorífico, tanto que comenzaron a llamar a la niña robot como “Chuckesmee”, en honor a Chucky, el muñeco diabólico, del terror que causaba el muñeco entre todo el equipo. Al final, el director optó por prescindir de la niña robot y utilizar los efectos especiales. Sin embargo, en los extras del DVD de la película, aseguran que aparecerá Chuckesmee.
