Esto es exactamente de lo que puede presumir la empresa norteamericana DoodyCalls, fundada hace no muchos años por Jacob D’Aniello y cuya principal función es recoger los excrementos que los perros depositan por calles, parques y jardines de los municipios donde la empresa actúa.
Jacob D’Aniello lo tiene claro. Según sus palabras, la única razón para que su negocio fracase es que la gente, de buenas a primeras, encuentre gratificante recoger los excrementos de los perros. Y según afirma D’Aniello con humor, eso no va a ocurrir nunca. Por eso, hacerse millonario recogiendo caca de perro es algo más que un chiste, es toda una realidad.
Los excrementos de los perros, la molesta caca de perro, no solo son un problema estético o que provoque desagrados pasajeros. La convivencia en barrios o algunas zonas de ciudades se ha visto perturbada por pendencias entre quienes no admiten esta suciedad evitable. Algunos padres evitan llevar a sus hijos a zonas infantiles y jardines por la presencia de excrementos de perro en el suelo. Este sería suficiente motivo para que los dueños de los perros se concienciasen y tomasen cartas en el asunto, compaginando la bonita tarea de cuidar y querer a un animal con la de ser un ciudadano respetuoso con sus semejantes.
Si bien de un tiempo a esta parte, los dueños de las mascotas se han concienciado, en gran parte, y es fácil ver al poseedor de un perro realizando la poca grata tarea de recoger con una bolsa el ‘regalo’ que le ha dejado su amigo en el suelo, la proliferación de perros en pueblos y ciudades… ha hecho que los restos dejados por el mejor amigo del hombre se conviertan en un problema para los que algunos tienen soluciones… como la empresa DoodyCalls.
Los de DoodyCalls tienen la función de recoger todas las deposiciones perrunas de las zonas para las que se les ha contratado. Así, cuando son avisados, un equipo se traslada al lugar y hace su trabajo. De momento, a DoodyCalls no le va nada mal. La facturación por año de la empresa, presente en 22 estados del país, asciende a casi… ¡5 millones de dólares!
JM-ZgZ
