Curiosidades de la Sal. «Controlar su consumo para Ganar Salud»

Cuando le decimos a alguien, que salado eres, lo hacemos pensando en que simpático es. Siempre es un halago, pero si hablamos de la sal como un mineral, deberíamos considerar los siguientes aspectos:

  • La sal contiene cloro y sodio, elementos que efectivamente necesita nuestro organismo para funcionar correctamente, aunque su consumo en exceso puede provocarnos trastornos importantes.

¡Abusamos demasiado de la sal!

Salar nuestros platos es una costumbre muy arraigada en nuestra gastronomía, que le puede pasar factura a nuestra salud. Menos sal, más salud.

Según datos de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición, doblamos la cantidad diaria de sal recomendada por la Organización Mundial de la Salud.

  • Un exceso de sal aumenta el riesgo de padecer hipertensión arterial, que es la responsable de una gran cantidad de enfermedades cerebro-vasculares. Controlar la sal es ganar salud.

Cuando consumimos mucha sal, nuestros riñones son incapaces de absorber ese exceso. Todo el sodio que no pueden eliminar se acumula en la sangre, que a su vez atrae al agua e incrementa el volumen de la circulación. Esto provoca que el corazón trabaje más forzado para mover esa cantidad de sangre y como consecuencia eleve nuestra presión arterial.

Dicho esto, no estamos diciendo que debamos eliminarla radicalmente de nuestra dieta. Como bien dijimos al principio, la sal contiene elementos indispensables para el buen funcionamiento de nuestro organismo. Por lo tanto, a no ser que tengamos ya un problema específico y el médico nos haya recomendado una dieta con un contenido bajo en sal, podemos seguir utilizándola normalmente pero con moderación.

Una buena recomendación para bajar el consumo de sal, es sustituirla por otros condimentos como hierbas aromáticas, pimienta o cualquier otra especie.

¡¡¡Y sobre todo, no te lleves el salero a la mesa!!!

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