Esta imagen de una bailarina girando sobre sí misma es muy bella y armoniosa, incluso nos resulta relajante mirarla. Pero, si nos fijamos un poco más a fondo, la pregunta que nos surge de inmediato es: ¿en qué sentido está girando?, ¿hacia la izquierda o hacia la derecha?.
Según la persona que observe esta imagen, la verá moverse en el sentido de las agujas del reloj o al contrario. Es más, si centramos la vista podemos verla girar alternativamente en un sentido o en otro.
Evidentemente la imagen tiene truco.
Hay quienes explican este fenómeno asociándolo a la interpretación visual de nuestro cerebro en el que, según cada persona, predomina el hemisferio cerebral izquierdo o el derecho.
Esta teoría no ha convencido a casi nadie, y ahora por fin se ha descubierto el secreto que esconde la bailarina girando sobre si misma: El psicólogo Niko Troje sostiene que el sentido en que el observador ve girar a la silueta de la bailarina depende del ángulo de visión con el que se vea la imagen.
Parece ser que nuestro sistema visual, si puede escoger, prefiere la perspectiva desde arriba y esta característica, junto con el ángulo de visión, son lo que hace que los observadores vean la silueta girando en un sentido determinado, y no la personalidad o el hemisferio cerebral predominante.
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