Existen diferentes tipos de jefes en el ámbito laboral, cada uno con sus matices y sus peculiaridades. Por ello, hoy en Curiosidades Curiosas queremos analizar los tres tipos de jefes más habituales en el plano laboral.
El jefe paternalista
El jefe paternalista, como indica su propio término es aquel que te trata como si fuese tu padre. Es una persona protectora que te cuida y que te protege. Esto que es tan positivo también tiene su lado negativo, y es que se trata de un tipo de personas que no te permite crecer a nivel laboral. Es decir, siempre quedarás estancado en el rol de “hijo”, porque el jefe paternalista “no delega”.
El jefe perseguidor
El jefe perseguidor es aquel que no sabe motivar porque siempre que se pone en contacto contigo lo hace para reñirte por algo que has hecho mal, sin embargo, nunca te felicita por un logro o por tu labor profesional. El jefe perseguidor entiende que para hacerse respetar por los demás, tiene que causar miedo porque confunde el temor con el respeto.
El jefe perseguidor se alimenta de víctimas, por ello, como trabajador, es importante que generes una distancia para que no te afecte esta situación.
El jefe asertivo
El jefe asertivo es el mejor jefe que puedes tener, es una persona afable y entusiasta que tiene habilidades sociales y capacidad para dirigir a un equipo. Utiliza el nosotros para generar motivación en el contexto de un grupo, trata a cada persona como única e irrepetible porque cada uno aporta un valor.
El jefe asertivo tiene una riqueza de vocabulario importante por ello, utiliza palabras como gracias, por favor y lo siento.
Estos son los tres jefes predominantes en el mercado laboral, y la verdad es que sobrevivir a los días duros en la oficina, depende, en parte, del hecho de tener a un jefe más positivo. Por ello, al buscar trabajo, merece la pena valorar la posibilidad de ser tu propio jefe.