Hoy os voy a hablar del que creo podría ser el hotel más sofisticado, lujoso y caro del mundo. Estoy hablando del Atlantis The Palm en Dubai. Se inauguró en 2008. Su ubicación ya es del todo única. Se encuentra en una isla artificial en forma de palmera. Es tal la suntuosidad que tiene que en algunas habitaciones puedes, a través de cristaleras ver el mar tumbado en la cama o en el mismísimo cuarto de baño. Hablo, en concreto de dos suites: la que lleva por nombre Poseidón y la otra Neptuno, dos nombres muy sugerentes que ya nos indican lo que vamos a poder disfrutar en ellas.
Además en la propia fachada del edificio se dispone de un gigantesco tobogán en el que podremos tirarnos desde una altura de nada más y nada menos que 27 metros y medio. Una caída con la que los más arriesgados pondrán a prueba su destreza y aguante. Pero si esto no fuera suficiente la propia cascada desemboca en un túnel a través del cual vas observando los tiburones que se encuentran libres al otro lado de las mamparas transparentes.
Y si sois de los que necesitáis disfrutar de un relajante baño spa, no te preocupes pues será raro que las 27 salas de que dispone el complejo estén todas ocupadas. Un hotel de ensueño sólo al alcance de muy pocos, pero no por ello podemos dejar de soñar con pasar una noche en una de sus habitaciones por unos 250 euros en temporada baja.
