El director mexicano se estrena en la animación.
El 3D y el «stop-motion» son lo más de lo más en el mundo del cine de hoy, pasando ya hasta de la misma sala a la propia casa. Y de ahí que un clásico que parece innecesario repetir como es el Pinocho de Disney este situado como una de las apuestas del cine de los próximos años. Y preparándose desde hace años también.
Desde 2008 está Guillermo del Toro, el director de Hellboy y productor y guionista de El laberinto del fauno, metido en este proyecto en labores unicamente de producción en compañía de Jim Henson. Ahora él mismo ha admitido que la historia que intentan llevar adelante necesitaba más compromiso y ha decidido desempeñar las labores de director sustituyendo a Gris Grimly, quien ilustró la versión del cuento en 2002.
Se tratará de su primera película de animación, algo a lo que sólo se ha dedicado como asesor y productor a través de la compañía Dreamworks, y asegura que impondrá su estilo presentando una cinta más oscura y tétrica que la original y apta para niños sólo a partir de 10 años.
Pinocchio es italiano. Una marioneta de madera creada por Carlo Callodi en su libro de aventuras. El creador en la ficción es un carpintero que siempre había deseado tener un hijo, Geppetto. Y el niño cobra vida y comienzan las historias. En 1940 Disney lo hizo dibujos animados ganándose hasta la consideración de «culturalmente importante» por la Biblioteca del Congreso de los Estados Unidos. Todo el mundo la ha visto y todo el mundo siente nostaliga al recordarla, sin hablar de la fama del Pepito Grillo, la conciencia a la que ya hasta en la vida real muchas veces llamamos así.
Y hasta que llega la versión nueva de Del Toro podemos seguir disfrutándola…
